lunes, 12 de octubre de 2009

La cuñada de M.L.: "Conversación (2)

-Muy filosófica te noto hoy – comentó Leonor

-Pero vamos a ver, ¿acaso a ti no te sucede lo mismo?

-Puede ser, lo que ocurre es que yo no sé expresarlo con palabras. Es cierto que me resulta agradable estar detrás de ti cuando tocas el piano. Cierro los ojos y me dejo llevar. Sé que acaricio tu pelo y me sorprendo viajando con la música. A veces, supongo que lo has notado, hasta muevo mi cuerpo en cada nota y es cierto que me satisface estar ahí contigo. Yo no sé si esto es felicidad, amor, ternura, cariño o cualquier otro adjetivo que queramos utilizar. Pero he de confesar que en estos momentos de mi vida, las vivencias que tengo contigo y el amor que siento por Roberto no los cambiaría por nada del mundo.

-¡Ves! No hay porque renunciar a nada. Y además creo que no hacemos mal a nadie. Porque si lo nuestro fuera realmente amor, yo creo que el amor nunca es malo, y si no lo fuese, por qué preocuparse.

-¡Joder, Ángela! Si que estás filosófica hoy, sí –contestó una consternada Leonor.

-¡Vamos, vive! Voy a tocar el piano para ti, me encanta que tus dedos se deslicen por mi pelo. ¡Ah, no te he dicho! Te he escrito un poema.

-Lo dicho, me agotas, Ángela. Léemelo.

-¿Antes o después de tocar?

-Antes, tonta.

-Escucha: “ Si es cierto

que en el amor

lo verdaderamente importante

es el otro.

Si es cierto que no es necesario

poseer el halo de la luna,

pues es suficiente un momento de ternura

Sí es bien cierto

que poco a poco nos morimos

y que esta tragedia que nos aguarda

no logra hacernos

más tiernos y comprensivos.

Si es cierto

que el auténtico patrimonio del hombre

es la amistad;

y que para conservarla

hay que echar, día a día, leña al lar.

Si es cierto

que el tiempo hay que vivirlo,

y no “pasarlo”

que es igual para todos,

y obra según la necesidad

que hagamos de él.

Que cada segundo

es tiempo de cerezas,

y que cada beso que desperdicio

de ti me aleja.

Si es cierto

y bien cierto,

que he de morir,

y has de llorar por los abrazos

que no me diste.

Dime: porqué no buscamos

ese momento de ternura,

localizamos entre las rocas

los amigos que nos falten,

y unimos los labios, sin separarlos,

hasta que la muerte pase de largo.”

-Ángela, toca el piano, por favor.

2 comentarios:

  1. Me gusta como vas construyendo poco a poco los perfiles de los personajes y el poema (que estoy seguro lo escribistes hace tiempo).
    Un abrazo

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  2. Tú sí que sabes, Fernando. Me cuesta, no creas, a veces me atasco y no tengo demasiado claro, todavía, dónde me llevará esto. Un abrazo

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