miércoles, 2 de diciembre de 2009

En el refugio de los sueños: Dos de diciembre

¡Felicidades Nico!

La primera vez que la vi iba vestida de verde, con el paso del tiempo me di cuenta que era el color que más le gustaba: hacía juego con el de sus ojos profundos, transparentes. Podías divisarle el alma a través de ellos. Tenía el pelo liso, rubio y largo, muy largo, casi le llegaba hasta la cintura. Cubría toda su espalda. No era alta pero lo parecía, debido a su delgadez. Su rostro, alargado, poseía la belleza de un Modigliani. Sus manos eran también finas y largas, cuando las movía soy consciente que el aire las acariciaba y bailaba con ellas. Parecía tímida y seductora al mismo tiempo. A mí me sedujo nada más verla.

Aparentaba ser una alumna más, pero desde el primer momento supe que no lo sería para mí. Observaba todos sus movimientos: eran armónicos desde un principio. Se fijaba en los míos poniendo toda su atención. Era perfecta, al menos en mi enamoramiento.

Así fue como la conocí.: desde la distancia.

Al terminar la clase la veía marcharse con sus amigas, siempre sonriente, y con la terrible duda de volverla a ver al día siguiente. Nunca faltó; su compromiso era total.

A los pocos días de darle clases me atreví a acercarme a ella, quería compartir con aquella mujer el resto de mis días, pero en el camino mi frustración se hizo evidente. No podía conquistarla más que con la mirada. No me hubiera permitido hacerlo de otra manera, la palabra me estaba vedada: era su profesor de mimo.


7 comentarios:

  1. Hola Rafa:

    Enhorabuena, cuando Nico lea esto se sentirá el hombre más afortunado de la tierra porque como me dice él, tengo "un suegro" que no me lo merezco. y hasta le voy a dar la razón jeje

    Un abrazo

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  2. Rafa, muchas gracias, de todo corazon, es increible, al igual que el relato de Cheyenne, es como si hubieras estado detras, mirando a traves de unos prismaticos,desde tu ventanal, a traves de la catedral,claro esta, porque siempre ha sido y sera tu ojito, por lo que solo me queda ser su guia.un abrazo enorme.

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  3. Enorme Rafa, me ha encantado de todo corazón, un regalo estupendo, al igual que el relato de Cheyenne, parece que has estado siempre detrás, mirando con unos prismáticos desde tu ventanal ,a través de la catedral, por lo que ahora ya se porque es tu ojito, por lo que yo seré su guía.Un abrazo

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  4. Hola Fernando: Eso de que Nico tiene un suegro que no se le merece, ¿no tendrá un doble sentido, verdad? Je,je. Un abrazo

    Hola Nico. Ya sabes que siempre será mi ojito, pero no olvides que no estoy tuerto. Estamos muy orgullosos y contentos, Mary y yo, de que seas su guía. Un abrazo

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  5. Hola Rafa, esta se me pasó. Está genial.
    Me ha parecido muy además muy simpático.
    Enhorabuena. Un abrazo

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  6. Katy:
    Ya no sé como agradecerte que te pases a diario.
    La verdad es que cada vez me divierto más escribiendo estas pequeñas historias. Un abrazo

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